Comunicar, del latín communis = de todos, significa propiamente compartir, «poner algo en común con los demás».
Por Jerónimo Moleque Ibáñez
Comunicar, del latín communis = de todos, significa propiamente compartir, «poner algo en común con los demás». De hecho, el acto de comunicar tiene por objeto transmitir información y mensajes a alguien.
Se pueden distinguir dos tipos principales de comunicación: la comunicación interpersonal y la comunicación institucional, profesional o de marketing. En ambos casos, el objetivo es transmitir un mensaje de forma eficaz.
La comunicación nos permite entablar relaciones con los demás. Y crear relaciones significativas es una de las necesidades básicas del ser humano.
Las relaciones interpersonales son esenciales para el desarrollo del individuo.
El vínculo de apego con el resto de la sociedad, y por tanto con los demás individuos que la componen, es una necesidad innata. Por esta razón, cuando la comunicación empieza a ser difícil, las relaciones se ven afectadas; en consecuencia, el propio bienestar psicológico.
¿Saber hablar significa saber comunicar? Todo ser humano desarrolla la capacidad de hablar en los primeros años de vida. El lenguaje nos distingue de cualquier otro ser vivo y nos permite realizar diversas funciones: expresar nuestras necesidades, experiencias, ideas; conversar, aprender, obtener información. Con el tiempo, el lenguaje se enriquece y se convierte en una herramienta eficaz para construir redes vitales de relaciones y responder a las distintas situaciones de la vida.
Sin embargo, en muchas situaciones de la vida social, nos comunicamos mal y no utilizamos el potencial que nos ofrece el lenguaje para gestionar mejor las relaciones interpersonales y los conflictos.
Una primera razón es que la calidad de la comunicación está estrechamente ligada a la calidad de la relación interpersonal. Así ocurre en todas aquellas situaciones en las que no se escucha al otro, hay malentendidos, agresiones, etc. Si. más allá de las palabras, existe un conflicto relacional, la comunicación también será conflictiva. De hecho, en toda comunicación hay un plano de contenido y un plano de relación. El problema es que a veces nos centramos en lo que decimos y olvidamos cómo nos sentimos en esa relación y cómo nos estamos comunicando.
Además, hay otros componentes que pueden interferir en la capacidad de comunicación, como la dificultad para gestionar emociones como el miedo o la ira; la falta de motivación para comunicar eficazmente; el aprendizaje de un estilo de comunicación disfuncional; la falta de conciencia del propio estilo de comunicación.
Tomemos por ejemplo el caso de una persona que tiene que hablar en público y lo hace demasiado rápido. Aunque se haya preparado el tema y sepa hablar perfectamente, puede que el mensaje no llegue a su público, que se distraiga o no entienda lo que dice.
Detrás de este comportamiento puede haber una fuerte emoción de ansiedad, o una falta de motivación por querer estar presente en ese momento, o finalmente puede haber aprendido a hablar muy rápido quizás imitando un modelo educativo. La falta de conciencia impide una intervención eficaz.
Consideremos entonces un segundo punto: a menudo se nos olvida que las habilidades de comunicación interpersonal pueden aprenderse, mientras que existe una especie de creencia de que una vez que se ha aprendido a hablar, el resto es sólo cuestión de carácter. Sin embargo, hay muchos ejemplos de niños que imitan la forma de hablar de sus padres. Imitar es, de hecho, uno de los procesos fundamentales del aprendizaje.
Esto nos lleva a reflexionar sobre lo importante que es prestar atención a este aspecto también a lo largo del desarrollo, reflejando lo que los niños sienten, piensan y hacen y proporcionándoles un buen modelo al que imitar.
Sin embargo, esto es valido a cualquier edad: de hecho, las habilidades de comunicación interpersonal pueden desarrollarse a lo largo de toda la vida, y el desarrollo más significativo puede producirse en edades más avanzadas. En efecto, cuando el individuo ha superado el egocentrismo típico de la infancia, ha acumulado un número suficiente de experiencias y ha construido una visión más amplia de sí mismo y de los demás, puede abrirse a formas de comunicación más complejas. En resumen, si en los dos o tres primeros años se puede decir que se aprende a hablar, el resto de la vida se pasa aprendiendo a escuchar y a comunicar.
La comunicación implica un cierto grado de conciencia e intencionalidad y un proceso en el que intervienen varios sujetos sociales.
Por eso las intervenciones no pueden dirigirse a analizar un solo acto comunicativo aislado de su contexto relacional, social y cultural. Por eso no existen fórmulas preestablecidas que revelen el secreto de la comunicación.
El aprendizaje de habilidades comunicativas eficaces implica, en primer lugar, una reflexión sobre uno mismo y las dinámicas interpersonales. También implica compromiso e intencionalidad, ya que las relaciones en sí son complejas.
Comunicarse eficazmente es una vía posible, que debe partir ante todo del conocimiento de uno mismo y de la voluntad de conocer y comprender al otro, así como del conocimiento de las múltiples implicaciones de la comunicación interpersonal.
La asertividad es, en conclusión, aquella competencia que permite reconocer las propias emociones y necesidades y comunicarlas a los demás, junto con nuestras ideas y peticiones, en el respeto mutuo, reconociendo también los derechos y necesidades del otro. Esto requiere asumir responsabilidades, exponerse y arriesgarse y, por último, confiar en uno mismo y en el otro. Esto puede ser complejo, pero nos permite sentirnos coherentes con nosotros mismos y establecer relaciones auténticas.
La comunicación desempeña un papel fundamental también en el ámbito de los negocios, en el mundo empresarial. De hecho, la comunicación es uno de los aspectos fundamentales en el business system y es el medio a través del cual fluye toda la información. Por comunicación, en el sentido profesional, entendemos el vasto complejo de actividades profesionales que van desde el periodismo y la edición, hasta la comunicación corporativa y el marketing, pasando por las producciones audiovisuales, los eventos y mucho más.
Y cualquier buen plan de Marketing no puede prescindir de la Comunicación.
En el ámbito empresarial, el concepto de “marketing y comunicación” se refiere a la división y actividades encargadas de conectar y comunicarse con los consumidores e interceptar a los grupos de interés, aquellos cuya opinión importa para el negocio. Y siempre tratando de “vender” bien el nombre de la empresa.
Comunicar es reunir, intercambiar información, conocimientos, necesidades, actitudes, emociones, percepciones entre sujetos implicados en un contexto espacio-temporal determinado sobre temas comunes. Mientras que hablar es el acto mecánico de fonación, comunicar es transmitir un concepto (no necesariamente hablando). No se puede no comunicar, y todo mensaje tiene un aspecto de contenido y un aspecto de relación.
Una comunicación eficaz implica el uso del lenguaje verbal, no verbal y para-verbal. Conocer reglas y herramientas específicas permite eliminar cualquier interferencia interna y externa que pueda dificultar la recepción del mensaje y la intención que subyace al proceso de comunicación. Y a nivel profesional, permite vehicular una información o conseguir un determinado resultado, generando el impacto correcto.
Frases celebres (y entretenidas) acerca de la Comunicación:
Si no disfrutas escribiendo, nadie disfrutará leyéndote.
John Bevins
La gente compra las revistas para leer. El promedio de artículos es seis veces más leído por la gente que el promedio de anuncios. En otras palabras, los editorialistas trabajan mejor la comunicación que los hombres de la publicidad. Entonces, por favor, hagan ustedes lo que hacen los editorialistas y no lo que hacen los publicitarios.
David Ogilvy
No puedes comunicar bien lo que estás haciendo mal. Primero hay que hacer las cosas bien y luego contarlas, no al revés.
Luis Abril
Si hay algo que no quieres que nadie sepa, quizás no deberías estar haciéndolo.
Eric Schmidt
La comunicación es como la religión: hay muchos creyentes y pocos practicantes.
Ricardo Pereda
Si tiene algo viejo que decir, dígalo de una forma nueva; si tiene algo nuevo que decir, dígalo, simplemente.
Howard W. Newton
Sé, haz y -solo entonces- comunica.
Luis Miguel Díaz-Meco
Las relaciones públicas son un maratón no un esprín.
Anónimo
Lo que haces habla tan fuerte que no puedo oír lo que dices.
Ralph Waldo Emerson
If I was down to my last dollar, I would spend it on public relations.
Bill Gates
La cuestión consabida de si un texto es largo o corto no está bien planteada. Lo importante es que ese texto transmita un mensaje interesante para el consumidor. Es así cuando será leído, aunque sea largo.
Max Gloor
Lamento haber escrito una carta tan larga. No tuve tiempo de hacerla más corta.
Mark Twain
Ningún discurso es absolutamente malo si es lo bastante corto.
E.C. McKenzie
Nadie se ha quejado jamás de un discurso demasiado corto.
Anónimo
Todas las desgracias de los hombres provienen de no hablar claro.
Albert Camus
Las grandes ideas son aquellas de las que lo único que nos sorprende es que no se nos hayan ocurrido antes.
Noel Clarasó
El lenguaje más efectivo es el que clarifica, no el que oscurece.
Frank Luntz
Stop selling. Start helping.
Zig Ziglar
Una marca que no se conoce, no es una marca. Es un secreto.
Ildefonso García Serena
Escuchar es siempre una buena estrategia (…). Básicamente todo es escuchar, entender y cambiar de comportamiento.
James Grunig
El mejor éxito de la Coca Cola es mantener joven un producto del siglo XIX.
Carl Spielvogel
De acuerdo con la mayoría de los estudios, el mayor temor de la gente es hablar en público, el segundo, la muerte (…) Por eso, si tiene que ir a un entierro es mejor que lo haga en un ataúd a que sea el encargado de hablar en el funeral.
Jerry Seinfeld
Las tres cosas más importantes de un discurso: quién lo pronuncia, cómo lo hace y qué se dice; y de las tres, la última es la que menos importa.
John Morley
Algunas cosas irán mal y seguramente nos acusen de ello. Tenemos que aceptarlo, disculparnos y ser capaces de convertirlo en algo bueno en el futuro.
Meghan Williams
Son necesarias más de tres semanas para preparar un buen discurso improvisado.
Mark Twain
Cuando no se piensa lo que se dice es cuando se dice lo que se piensa.
Jacinto Benavente
Me he pasado toda la noche preparando la improvisación de mañana.
Winston Churchill
Más vale que compitas contigo mismo, antes que tu competidor lo haga por ti.
James O. Peckham
Si no tiene una buena idea que vender, mejor ni comience. “Pida tiempo” como en un partido de baloncesto.
Anónimo
Es imposible predicar y ser escuchado sin distraer o entretener.
Eduardo Punset
Siempre, siempre, siempre hay algo que corregir. No te fíes del corrector ortográfico porque no distingue vello púbico de bello público.
Shannon Mouton
Los galardones son buenos para las agencias, no para los anunciantes. La publicidad es un negocio para promover ventas, no un negocio para el espectáculo.
Jack Trout y Al Ries
Evite las agencias que “están de moda”. Cuando lo estén, estarán ya “pasadas de moda.
Anónimo
Recuerda que el público siempre está pensando WIIFM (What’s In It For Me?) [En español QHDLM (¿Qué hay de lo mío?)].
Tripp Frohlichstein
Lo importante no es lo que dices sino lo que la gente entiende.
Frank Luntz
¿Alguien tiene las preguntas para mis respuestas?
Henry Kissinger
Los consumidores compran marcas, no empresas. Así que cuando el nombre de una empresa se utiliza como marca (GE, Coca Cola, IBM, Xerox, Intel), el cliente ve esos nombres como marcas.
Al y Laura Ries
En una campaña, se sabe cuando se empieza a trabajar. Nunca cuando vas a terminar.
Juan Campmany
Siempre es un riesgo hablar con la prensa: suelen publicar lo que dices.
Hubert H. Humphrey
Las preguntas no hacen ningún daño. Solo las respuestas pueden hacerlo.
Sam Donaldson
Solo porque alguien te haga una pregunta no significa que tengas que contestarla.
Darlene Tenes
Nunca digas nada que no te gustaría ver publicado.
Marc Holloran
Mi historia favorita del gran Lasker fue ésta: después de diferentes intentonas de su agencia para obtener una cuenta importante, Lasker lo quiso intentar personalmente. Obtuvo la cuenta. Al preguntarle cómo lo hizo, su respuesta fue ésta: simplemente le dije que me proponía hacerle rico.
John O’Toole
Si tienes un buen argumento, no trates de ser sutil o ingenioso. Utiliza un martillo pilón. Dale una vez. Luego vuelve y golpea de nuevo. Luego, una tercera vez (…).
Winston Churchill
El negocio de decir lo mismo una y otra vez es aburrido, pero funciona.
Michael Deaver
La conocida frase: “No se gana tiempo parando el reloj”, debería figurar en muchos despachos de altos ejecutivos.
Anónimo
Si siempre contratas a gente “más pequeña” que tú, acabaremos convirtiéndonos en una empresa de “enanos”. Si, al contrario, siempre contratas a gente “mayor” que tú, nos convertiremos en una empresa de “gigantes”.
David Ogilvy
No entiendes realmente algo a menos que seas capaz de explicárselo a tu abuela.
Albert Einstein
Yo estudio el producto, y luego imagino lo contrario de lo que diría cualquiera sobre el producto. Pero saldrá un disparate, le dijeron. ¡Desde luego! el secreto profesional consiste luego en racionalizar ese disparate.
Savignac
Solo se recuerda lo que se siente.
David Brierly
El silencio no es rentable.
Enrique Alcat
Ninguna palabra fue nunca tan efectiva como un silencio correctamente administrado.
Mark Twain
En caso de duda, cuenta la verdad.
Mark Twain
Si se va a conocer con el tiempo, mejor que se conozca de inmediato. Henry Kissinger
Cuando abandone el trabajo cotidiano cierre su despacho, pero no su mente. Algunas de las mejores ideas nacen en las “horas libres”
Anónimo
Ser transparente es también una ética.
Jeff Jarvis
A veces, cuando alguien tiene una idea novedosa, los demás piensan que es una tontería.
Keith Reinhard
Los “gigantes” de la comunicación siempre han sido poetas; hombres o mujeres que, partiendo de hechos, los han elevado al reino de la Imaginación y las Ideas.
Bill Bernbach
Todos somos amateurs. La vida es tan corta que no da para más.
Charles Chaplin
Si A representa el éxito en la vida, la fórmula es:
A = X + Y + Z.
La X es el trabajo; y la Y, la manera de aplicarlo.
¿Y la Z, señor Einstein? – le preguntaron.
¿La Z? Callar a tiempo.
Albert Einstein